El piano es para mí como la
fragata para el marino, o el corcel para el árabe, y mucho más; porque en el
que tenido hasta hoy mi palabra, mi vida y un íntimo depositario de todo cuanto
agitó mi cerebro. Para mí es enorme la importancia del piano; me tiene atado
por cadenas que no podría romper jamás. en mi opinión, ocupa el más alto puesto
entre la numerosa familia de los instrumentos musicales. Es el más completo de
todos y el único que progresa y se perfecciona cada día. Su extensión es de más
de siete octavas, sobrepasando, pues la de la orquesta. Los diez dedos de un
hombre bastan para manejar este rico material sonoro, mientras que la orquesta
necesita del esfuerzo de cien ejecutantes. Se pueden imitar en él los acordes
del arpa, cantar como los violines, hacer estacatos, ligar y ejecutar sobre el
mismo, cientos de ataques que antes no era posible sin el auxilio de numerosos
instrumentos. Además el piano tiene más que ningún otro instrumento la
posibilidad de participar en la vida del hombre, a pesar de sus rasgos tan
personales.
Liszt, Gazette
musicale, 1837